Entrevista: Delphine Gardère, directora de rones Barbancourt (Haití)

Heredera de una tradición de 160 años, Delphine Gardère asumió la dirección de Barbancourt en circunstancias dolorosas, tras el fallecimiento de su padre. Desde entonces, lucha por promover el ron haitiano en todo el mundo, ¡con un éxito innegable!

Barbancourt Delphine Gardère

Cuando empezaste, hace ocho años, ¿te aceptaron fácilmente tus compañeros masculinos?

Entrar en una empresa familiar a los 33 años, siendo mujer, en un sector históricamente masculino, no fue fácil. Había expectativas implícitas, ideas preconcebidas, a veces incluso comparaciones. Tenía que demostrar mi valía, demostrar mi legitimidad y construir mi lugar, no solo heredarlo.

Rápidamente comprendí que el liderazgo no reside ni en la autoridad ni en el volumen de la voz, sino en la constancia, la escucha, la fiabilidad y el ejemplo. La confianza se gana con el tiempo, y son los actos, mucho más que las palabras, los que realmente hablan.

¿Había muchas mujeres en la industria del ron?

Por desgracia, no. Cuando empecé, no tenía realmente modelos femeninos en la industria del ron. Es un entorno en el que las mujeres estaban poco representadas, sobre todo en puestos directivos.

Pero antes de eso tuve la suerte de trabajar en el mundo de la cosmética, un sector en el que las mujeres ocupan un lugar más importante. A lo largo de mi trayectoria, también he conocido a mujeres inspiradoras, incluso de otras industrias. Su fuerza, su visión y su forma de liderar con autenticidad me han servido de modelo y me han permitido afirmarme.

¿Cómo han evolucionado las cosas?

De manera positiva. Hoy en día, veo cada vez más mujeres en la industria del ron, o incluso dentro de nuestra propia empresa. En nuestra empresa, hemos aumentado la presencia femenina de casi 22 mujeres en 2020 a 56 mujeres en 2025 en todo Barbancourt, lo que supone un aumento de más del 155 %, lo que demuestra un compromiso real con la diversidad y la inclusión.

Las mujeres ocupan puestos variados, pero también puestos de responsabilidad: en producción, logística, marketing, contabilidad. Este movimiento es alentador, ya que demuestra que las habilidades y el talento de las mujeres están encontrando por fin el reconocimiento que merecen en países y en un sector que durante mucho tiempo se ha considerado exclusivamente masculino.

¿Qué se podría hacer para animar a las mujeres a desarrollar su carrera profesional en la industria del ron?

En primer lugar, hay que aumentar la visibilidad de las mujeres en el sector: los «modelos a seguir» inspiran y abren vocaciones. Durante mucho tiempo, los oficios relacionados con el ron se han considerado un ámbito exclusivamente masculino.

Es esencial destacar a las mujeres que ya trabajan en él, con el fin de crear modelos a seguir para las generaciones futuras. Por último, es necesario crear un entorno de trabajo inclusivo y diverso en el que el talento femenino pueda expresarse libremente, sin tener que «demostrar» más que los demás.

Esto pasa por una cultura empresarial que valore la diversidad de experiencias, puntos de vista y formas de hacer las cosas. Animar a las mujeres a desarrollar su carrera profesional en el sector del ron no es solo una cuestión de equidad, sino que también supone una riqueza para la propia industria.

¿Alguna vez se ha enfrentado a comportamientos sexistas y/o agresiones en el ámbito laboral?

Sí, como muchas mujeres en sectores tradicionalmente masculinos, me he enfrentado a actitudes sexistas. No siempre es algo frontal, sino que a menudo se manifiesta de forma sutil: te interrumpen, te explican cosas que ya sabes, cuestionan tu legitimidad.

Cuando llegué a la dirección de la empresa, algunos solo veían en mí a «la hija de», una heredera que había llegado de fuera, en lugar de una directora competente. Sentí esa mirada sesgada desde el principio, sobre todo porque en aquella época no conocía a ninguna mujer en un puesto de liderazgo en Haití.

Pero no dejé que esas percepciones me definieran y conocí a otras mujeres que me ayudaron en mi trayectoria: que me inspiraron, me apoyaron y me ayudaron. Me apoyaron en mi decisión de modernizar, estructurar y dar a conocer Barbancourt. Y, con el tiempo, los resultados hablaron por sí mismos. Hoy sé que mi voz tiene peso, no porque lleve un apellido, sino porque he demostrado mi valía.

Barbancourt gamme

¿Existe una forma «femenina» de producir ron?

Creo firmemente que sí. Las mujeres tienen una sensibilidad diferente, moldeada por sus experiencias, sus emociones y su forma de entender el mundo. Experiencias como la maternidad, por ejemplo, transforman profundamente nuestra forma de percibir, sentir y crear.

En mi caso, mi trayectoria en el mundo de los perfumes, un sector en el que el olfato lo es todo, me ha permitido desarrollar mi «nariz». Hoy en día, encuentro esa sensibilidad en la degustación, en el equilibrio de los aromas…

Producir ron no es solo una cuestión de técnica, también es un acto de creación, de intuición… Creo que las mujeres tienen un lugar en esta dimensión más sensorial y emocional del oficio, y que aportan una riqueza especial.

¿Por qué cree que hay menos mujeres que hombres que disfrutan degustando rones?

El mundo ha cambiado y hoy en día las mujeres ocupan puestos de responsabilidad en muchos sectores, incluidos aquellos en los que históricamente tenían poca representación. Creo que es hora de cambiar las normas del ron creando espacios más inclusivos y abiertos, en los que las mujeres se sientan plenamente legitimadas para explorar, degustar e incluso producir esta bebida espirituosa.

Durante mucho tiempo, el ron se ha asociado a una cierta idea de poder, de virilidad, con imágenes a menudo estereotipadas, como la del «ron de los piratas». Las mujeres no eran el objetivo de los discursos de marketing ni se las valoraba en el sector. Esta falta de representación ha contribuido a mantener una distancia.

¿Cómo se las puede convencer para que le den una oportunidad al ron?

Hoy en día, depende de nosotros romper esos códigos, dar más visibilidad a las mujeres apasionadas y hacer de la degustación de ron una experiencia universal, rica y abierta a todos los paladares.